RESEÑA “MEDEA” DE EURIPIDES

Como nos encontramos en Mayo, decidimos buscar una obra que hablara sobre una madre, para ir en consonancia con lo que ocurre en el mundo. Así nos encontramos con un texto que habla de una madre bastante particular, una mujer que toma algunas decisiones que dejan a cualquiera con la quijada en el suelo. Un texto cargado de tragedia, como gran parte de las obras griegas que dieron origen al teatro que hoy conocemos.

“Medea” es una Tragedia Griega escrita por el dramaturgo Eurípides y estrenada bajo el arcontado de Pitodoro, el primer año de la Olimpiada ochenta y siete, es decir, el año 431 A.C. Es un texto escrito para un poco más de nueve personajes y su historia se encuentra distribuida a lo largo de unas 59 páginas. Al iniciar la acción nos encontramos con la nodriza de los dos hijos de Medea, quien en un soliloquio, muy comunes en este teatro, nos cuenta cual es la mala situación que está viviendo su ama. En estos primeros diálogos nos enteramos que Jasón, esposo de Medea, ha decidido comprometerse en matrimonio con Glauce, hija del rey Creonte de Corintio ante el asombro de nuestra protagonista. Frente a esta situación Medea se encuentra sumida en un mar de lamentos por la traición de su esposo y el destino que le ha tocado vivir. La nodriza dentro en su tristesa deja notar su preocupación por lo que pueda hacer Medea con sus hijos por venganza o por dolor. Mientras la Nodriza llora las desdichas de su ama, entra a escena el Pedagogo, quien está encargado de la educación de los niños. Este personaje llega informado que ha escuchado que Creonte piensa desterrar a Medea de Corintio por miedo a lo que pueda hacer como represalia por lo que le ha hecho su esposo. Luego de toda esta información, esteprimer par de personajes salen y entra Medea, quien se lamenta desgarradoramente por los males que está viviendo. Mientras esto ocurre, llega el Coro Griego, quienes representan en esta obra a las mujeres de Corintio.

 Medea mantiene una conversación con estas mujeres en la que traza su plan de venganza, aunque para este momento aun duda en llevarlo a cabo. Mientras reflexiona sobre el tema, llega Creonte a informarle de su decisión de desterrarla por temor a que ella tome represalias en contra de él o su hija por lo que su esposo le ha hecho. Medea le suplica que no lo haga, que no tiene donde ir con sus hijos, pero Creonte enérgicamente se niega a que se quede en tierras Corintias. Medea le pide, al menos, que la deje quedar ese día para organizar sus cosas y partir al día siguiente. Creonte accede a la solicitud concediéndole quedarse solo ese día, pero con la obligación de partir al siguiente día sin excepción. En estas circunstancias se retira Creonte, dejando a Medea sumida en un odio aun mayor del que pudo tener al comienzo y declara a las mujeres de Corintio (Coro) su plan para matar al rey y su hija con un veneno muy dañino. En este instante entra Jasón, a quien Medea agrede con insultos y maldiciones por su traición. Jasón, tratando a aclarar las cosas, declara que la idea de comprometerse con Glauce, hija del rey, fue para que ella y sus hijos tuvieran todas las comodidades posibles y no por despreciar a Medea como mujer. Así Jasón le ofrece ayuda para salir de la situación de destierro en la que se encuentra, pero ésta rechaza cualquier ayuda ofrecida por Jasón. El hombre molesto se va, dejando a la madre traicionada sola con su problema y su dolor. Para este momento, la protagonista de esta historia se encuentra destrozada como mujer y como madre, pero en una especie de tregua que le regala el destino, se encuentra a Egeo, quien es el monarca en Erecteo y que vuelve de un encuentro con el oráculo, pues estaba pidiendo la posibilidad de tener hijos, ya que durante años no ha podido engendrar ninguno. Medea pide ayuda a este hombre y le promete hacer los hechizos necesarios para que puede procrear hijos sin ningún problema, pero con la condición de que pase lo que pase nunca dejará que la saquen de sus tierras. Egeo acepta y cierran el trato, pero Medea le informa que primero deberá hacer algunas cosas antes de salir camino a Erecteo.

Ahora nuestra protagonista, con un lugar donde llegar, decide emprender su plan de venganza y hace llamar a Jasón. Cuando este está en su presencia, Medea le pide que hable con su nueva esposa para que interceda ante Creonte para que sus hijos no sean expulsados de Corinto. Así le envía, con los niños, un Peplo y una corona de oro como agradecimiento adelantado por los favores que espera recibir. Jasón muy contento va junto con sus hijos y el pedagogo a hablar con Glauce quien, por boca del Pedagogo al volver nos enteramos, se negó en un primer momento a las solicitudes de Jasón, pero luego, al ver los presentes, decide interceder ante el rey y éste acepta que los niños se queden, pero mantiene su decisión respecto a la madre. Luego un mensajero que llega corriendo ante Medea, le informa la manera en que muere Glauce y su padre el rey luego de ponerse los atuendos que le habían entregado los hijos de Medea, una muerte en la que:

El Mensajero: (…) “Ya no tenía brillantes los ojos ni hermosa la cara. Y por su cabeza corría la sangre mezclada con el fuego, y se la despegaga de los huesos las carnes, cual lágrimas de pino, bajo las invisibles mordeduras del veneno. ¡Horrible espectáculo!

Medea se alegra por lo ocurrido, pues su plan está saliendo a la perfección, pero ella sabe que las represalias no se harán esperar y siente que su venganza a un no está completa. Con estas ideas claras, toma la decisión final que la llevaran a consumar su plan.

Medea es un texto muy trágico, en el que las decisiones de los personajes están cargadas de sangre, odio y venganza, donde las consecuencias de las acciones humanas tienen un final funesto. Es una obra fundamental dentro de la historia del teatro así como su autor, un texto que recomendamos leer.

P.D: Sus comentarios son importantes para nosotros. Nos leemos la proxima semana